Hemos ido sacando y nos hemos encontrado con:
Unas ramas de nogal con sus frutos todavía dentro de la cáscara. Hemos podido ver que las nueces se esconden dentro de otra cascara verde y blanda. Hemos sacado las nueces de su cáscara y luego hemos roto la nuez para ver el fruto por dentro.
Lo hemos tocado, olido, pero no lo hemos probado.Ya sabemos que todavía somos pequeños para poder comer frutos secos. Así que nos toca esperar un poco para poder probarlo.
También hemos podido ver que las nueces todavía estaban verdes y que la piel que cubre la nuez es verde y se tiene que pelar para poder comerla.
Luego hemos sacado también las ramas de un roble con pequeñas bellotas.
Les ha parecido gracioso el "gorro" que llevan puesto y que se les cae en cuanto las tocas. Éstos frutos no los hemos podido romper y tampoco se comen, solo lo comen las ardillas y los cerditos. Pero lo hemos observado todo al detalle.
Otro fruto seco que hemos encontrado ha sido la rama del castaño y las castañas dentro de su cáscara de pinchos. Éste fruto ya lo conocíamos, porque lo vimos la semana pasada. Enseguida se dieron cuenta de ello y lo dijeron. Pero también hemos abierto la cáscara para ver cómo sale la castaña y los pinchos de la cáscara de fuera.
Por último nos hemos encontrado con un membrillo. Todos decían que era una manzana, pero cuando lo olieron enseguida dijeron que no olía a manzana. Ninguno conocía el membrillo, así que hemos tocado su piel suave y brillante, lo hemos olido pero no han querido probarlo. Así que lo hemos colocado entero en el rincón del otoño para que lo puedan ver y oler cuando quieran.
¡GRACIAS ANTÍA POR TODOS ÉSTOS FRUTOS DEL OTOÑO!
Me encanta que bonita idea
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