CUENTO ¿A QUÉ SABE LA LUNA?

Una de las actividades para cerrar el Proyecto del Espacio ha sido contar el cuento de ¿A qué sabe la luna? con la mesa de luz. 

En el cole hemos comprado para el Aula Sensorial una nueva mesa de luz, plana y bastante grande. Se puede usar en mesa o en el suelo. La verdad que es fantástica y hoy la hemos estrenado. 

Hemos subido todos con mucho cuidado al Aula Sensorial y nos hemos sentado alrededor de la mesa de luz. 

Hemos visto la portada del cuento. Me ha alegrado un montón que muchos de los peques me dijeran que ellos tienen ese cuento en casa o que se lo han leído. Pues hoy lo vamos a escuchar de una forma distinta. Hoy usaremos la mesa de luz. 

Para usar las imágenes en la mesa de luz, he probado una técnica nueva para imprimir las imágenes. He comprado hojas de transparencias para impresoras y he imprimido las imágenes del cuento con la impresora de color que tenemos en el cole. Han quedado perfectas, luego las he plastificado para que me duren mucho más y listas para usar todas las veces que queramos. Acabo de descubrir un gran invento!!!

Una vez colocados todos, hemos visto la portada del libro, hemos comentado lo que sabíamos del cuento, de qué trata, quiénes aparecen... Después de terminar de hablar hemos centrado  nuestra atención en la mesa y preparados para escuchar el cuento. 

Según voy contando el cuento, van apareciendo los personajes en la mesa de luz, se vé estupendamente a los personajes del cuento. El primer personaje en aparecer ha sido la luna, que estaba colocada en la zona alta de la mesa, a continuación apareció la tortuga, en la zona más baja de la mesa y seguidamente fueron apareciendo el resto de animales, hasta que el pequeño ratón se colocó en la cima de la montaña de animales y consiguió comer un trocito de luna y repartirlo entre todos los demás animales. 

¡¡NOS HA ENCANTADO ESCUCHAR EL CUENTO EN LA MESA DE LUZ!!

Pero esto no termina aquí... Hemos comentado a qué les habrá sabido la luna, porque los animales decían que les sabía a su comida favorita... y los peques nos han dicho a qué les ha podido saber... hemos comentado lo que ha ido ocurriendo en el cuento, hemos hecho preguntas sobre lo escuchado, han dado su opinión de lo ocurrido... 

Para terminar, nosotros también vamos a probar un trocito de luna, para saber a qué sabe. Repartimos a cada uno una tortita de maíz. Ésto va a ser nuestro trozo de luna, lo vamos a saborear como ya sabemos muy bien, a través del Mindfulnees. 

Estamos atentos y centrado en nuestro trozo de luna, cerramos los ojos y comenzamos... 

Primero lo tocamos, notamos sus rugosidades, su textura, si es duro o blando... también lo olemos, nos centramos a ver a qué nos recuerda, si nos gusta su olor... Luego hemos abierto los ojos y hemos observado su forma, su color, sus distintos tonos... finalmente, volvemos a cerrar los ojos y ahora por fin la probamos, comemos un trocito, lo saboreamos, lo comemos despacio, disfrutamos su sabor, su textura en la boca, nos imaginamos que es un trocito de luna y pensamos a qué nos puede saber. 

Una vez terminado de probar el trocito de luna muy atentamente, vamos a contar a qué nos ha sabido el trocito de luna que hemos probado. El cuento dice que la luna sabía al alimento que más nos gusta. A nosotros también... Nos han ido diciendo a qué les ha sabido y hemos escuchado que a caramelo, a chocolate, a piruleta, a limón, a fresas con nata... Es increíble lo bien que sabe la luna y la cantidad de sabores diferentes que tiene!!!!

Bajamos a clase y allí vamos a recordar el orden de los animales según se han ido subiendo. Para ello vamos a recordar los números ordinales. Tenemos unas tapas con los números ordinales desde el 1º al 10º. Recordamos la diferencia que hay entre los números cardinales y los números ordinales. Nos fijamos muy bien que los números que tenemos hoy tienen un circulo al lado del número, esto nos va a servir para diferenciar los números cardinales de los ordinales. 

Enseguida se dieron cuenta que el orden es el mismo que los cardinales, ya querían poner en orden todos los números... Pero esperad!!! que cambia algo, cambia su nombre. 

Tenemos que aprendernos los nombre de los números ordinales que son distintos. Muchos de ellos ya se los saben, pero los nombres de los números más grandes todavía no nos suenan mucho, así que vamos a jugar con sus nombres para recordarlos. Para ellos cantamos una pequeña canción con los nombres de todos desde el 1º al 10º. Una vez que lo hemos cantado unas cuantas veces, pasamos a ordenar las tapas con los números ordinales. Lo primero que hacemos es colocar los animales que van subiendo a la montaña en su orden correspondiente y a la vez vamos nombrando su ordinal. 

Cuando ya tenemos todos los animales ordenados y colocados, vamos a ir poniendo a su lado su número ordinal correspondiente. Vamos nombrando el ordinal y el niño que tiene ese ordinal lo colocar al lado de su animal. 

El número 10º se lo hemos colocado a la luna, porque el la última que aparece en la montaña de animales y así recordamos todos los ordinales que hemos estudiado. 

¡¡YA CASI, CASI NOS SABEMOS TODOS LOS NOMBRES DE LOS ORDINALES HASTA EL 10º!!!

Ahora que ya nos sabemos el orden de los animales, vamos a crear nuestra montaña de animales del cuento que acabamos de escuchar. En dos hojas tenemos todos los animales que forman la montaña para llegar a probar la luna. Los hemos coloreado muy bien, los hemos recortado y ahora vamos a montar la montaña de animales y la luna para representar lo más importante del cuento. 

Han quedado muy chulos!!!!

¡¡CÓMO HEMOS DISFRUTADO DEL CUENTO!!!